Es una ensalada un poco peculiar, recomendada para los más
atrevidos. Pero su presentación y su sabor, no dejarán indiferente a ningún
comensal.
Preparación: 40 minutosIngredientes:
500 gr de remolacha roja
100 ml de caldo de verduras
Cebollino
Crema de queso fresco
Miel
Aceite balsámico de MódenaCayena en polvo
Sal
Tenemos que sacar la remolacha del envoltorio, la lavamos bien y la pelamos. Ojo que mancha mucho, si tenéis guantes desechables recomiendo que los utilicéis, y que tengáis cuidado con que se manche la ropa. Cortamos la remolacha en cachos medianos y los colocamos en una olla.
Añadimos el caldo de verduras, un chorrito de aceite
balsámico y un par de cucharadas pequeñas de miel. Echamos una pizca de sal y
otra de cayena (cuidado que pica). Dejamos que se cocine todo a fuego medio bajo,
durante 30 minutos.
En un bol, colocamos la crema de queso y le añadimos el
cebollino cortado en cachitos muy pequeños. No hace falta echar mucho
cebollino. Le añadimos un chorro de aceite de oliva y lo mezclamos bien. Para servir colocamos en un plato hondo la remolacha y en el medio, con la ayuda de un cucharón colocamos una bola grande de crema de queso, y para decorar con unas ramitas de cebollino le daremos alegría a nuestra deliciosa receta!